La Tercera , opiniones, 18/10/2010.-
La ley que modifica el Código Penal y el Decreto Ley N° 321, de 1925, para sancionar el femicidio y aumentar las penas aplicables a este delito, fue aprobada la semana pasada por 95 votos a favor por la Cámara de Diputados.
Desde hace un tiempo, los medios de comunicación han informado con creces esta realidad que tiene por víctimas a mujeres, lo cual condujo a la presentación a esta alteración en la ley.
Esta innovación estipula esencialmente al castigo del femicidio, imponiéndose penas ejemplificadoras, sin darles a los hechores posibilidad de beneficios carcelarios. También modifica normas de la ley de violencia intrafamiliar, otorgándole al juez facultades para tomar medidas de protección en caso de riesgo de agresión. Medidas todas estas que, a mi parecer, la ciudadanía esperaba.
Sin embargo, se me presenta una inquietud, la cual respecta al problema medular del femicidio. Se busca castigar un hecho consumado, pero la solución de aquella consumación y su posible disminución es la que no se presenta en este proyecto.
Sin menoscabar el gran trabajo legislativo de la Cámara en este asunto, esto es otro parche a la herida de la delincuencia.
Juan Pablo Collao A.
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