El último informe de la Dirección del Trabajo da cuenta que la brecha entre hombres y mujeres no cede.
Sólo el 28,6% de la fuerza laboral chilena tiene rostro de mujer, un 52,8% gana menos de 270 mil pesos mensuales y un 35,2% obtiene entre 135 mil y 202 mil pesos cada treinta días. El 6,2% logra superar el millón de pesos.
Las cifras emanaron del análisis de la quinta encuesta Encla, de 2006, que con datos de 1.281 empresas, confirmó la plena vigencia de una vieja práctica: no contratar más de 20 mujeres por empresa, pues hacerlo obliga a otorgar el beneficio de sala cuna.
El informe indica que sólo un 12,9% de las empresas tiene 20 o más trabajadoras, el 75,3% contrata menos de 20 y un 11,8% sencillamente no incorpora mujeres.
Para peor, de los empleadores que sí cuentan con 20 trabajadoras, el 25,6% incumple la norma, es decir, no proporciona sala cuna, ni paga el bono equivalente.
El dato se corrobora cuando se constata que la mayor cantidad de mujeres contratadas ocurre en las microempresas (35%) donde, coincidencia o no, por ley el empresario no está obligado a otorgar sala cuna.
"Es necesario sincerar varias cosas. Uno es el tema de costo, sin duda, de la sala cuna. Y dos, se tiene que cambiar la mirada. Ser mujer se vuelve una carga si las políticas no consideran que tanto madre y padre son responsables de la crianza", resumió la directora del Trabajo, Patricia Silva, a la hora de comentar los resultados.
Sólo el 28,6% de la fuerza laboral chilena tiene rostro de mujer, un 52,8% gana menos de 270 mil pesos mensuales y un 35,2% obtiene entre 135 mil y 202 mil pesos cada treinta días. El 6,2% logra superar el millón de pesos.
Las cifras emanaron del análisis de la quinta encuesta Encla, de 2006, que con datos de 1.281 empresas, confirmó la plena vigencia de una vieja práctica: no contratar más de 20 mujeres por empresa, pues hacerlo obliga a otorgar el beneficio de sala cuna.
El informe indica que sólo un 12,9% de las empresas tiene 20 o más trabajadoras, el 75,3% contrata menos de 20 y un 11,8% sencillamente no incorpora mujeres.
Para peor, de los empleadores que sí cuentan con 20 trabajadoras, el 25,6% incumple la norma, es decir, no proporciona sala cuna, ni paga el bono equivalente.
El dato se corrobora cuando se constata que la mayor cantidad de mujeres contratadas ocurre en las microempresas (35%) donde, coincidencia o no, por ley el empresario no está obligado a otorgar sala cuna.
"Es necesario sincerar varias cosas. Uno es el tema de costo, sin duda, de la sala cuna. Y dos, se tiene que cambiar la mirada. Ser mujer se vuelve una carga si las políticas no consideran que tanto madre y padre son responsables de la crianza", resumió la directora del Trabajo, Patricia Silva, a la hora de comentar los resultados.
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